Una inspiradora charla con el Rabino Tzvi Grunblatt para prepararnos para Rosh Hashaná
- Por Moishe Brand
- 18 de septiembre de 2024 @ 12:36
- Artículos, Agradecimientos, Jaguim, Kabalá, Noticias
El domingo pasado tuvimos el honor de recibir al Rabino Tzvi Grunblatt, director general de Jabad Argentina, para una inspiradora charla como preparación para Rosh Hashaná.
El Rabino Tzvi nos brindó increíbles secretos de la Kabalá, revelándonos profundas interpretaciones sobre el comienzo del año judío.
Durante las plegarias de Rosh Hashaná mencionamos a tres mujeres, personajes femeninos muy importantes del Tanaj. Las tres eran estériles y, después de pedir mucho por un hijo, en el día de Rosh Hashaná, HaShem se acordó de ellas y les regaló un hijo.
Ellas son:
- La matriarca Sara
- Rajel
- Y Jana, la madre del Profeta Shmuel
Curiosamente, por Providencia Divina, las tres comparten letras en sus nombres en hebreo, pero cada una tiene una letra única y diferente:
- Sara tiene la Sin (ש), con el valor numérico de 300
- Rajel la Llames (ל), con el valor numérico de 30
- Jana la Nun (נ), con el valor numérico de 50
Increíblemente, hay otro lugar en la Torá donde encontramos exactamente esos números: ¡las dimensiones del Arca de Noé!
300 codos de largo, 50 codos de ancho y 30 de alto.
La Kabalá nos enseña que el rol de la madre judía es crear un Arca donde su familia esté protegida del diluvio afuera.
En tiempos de tanta confusión, problemas y oscuridad, tenemos la obligación de educar a nuestros chicos de una manera en la que estén protegidos y, al mismo tiempo, sean los suficientemente fuertes como para enfrentar la vida con sus obstáculos.
Y para eso necesitamos:
- Largo: necesitamos mostrarle a nuestros hijos las consecuencias de nuestras acciones a largo plazo, y a tener una visión de crecimiento a futuro.
- Alto: en el arca, la altura delimitaba los tres diferentes pisos. El piso más alto para los seres humanos, el del medio para los animales y el de abajo para la basura. Así también tenemos que transmitir el poder de discernimiento a nuestros hijos. Incluso en una cultura progresista, etc., hay que saber que, así como existen comportamientos humanos y comportamientos animales, también existe la basura.
- Ancho: el poder de recibir a todos y de estar para los demás.
Y no sólo la madre tiene la obligación de trabajar en esos tres aspectos en la educación de los hijos, sino que a todos nos cae el deber de auto-educarnos en esos sentidos, principalmente cuando comenzamos un nuevo año con nuevas resoluciones.
Agradecemos profundamente a nuestro Presidente en Hebraica, Jonathan Lemcovich, por la iniciativa y el apoyo para que este evento sea posible.
Muchas gracias al Rabino Ionatan Sirota por el aporte.
Muchas gracias al Rabino Tzvi por las hermosísimas palabras.
¡Y muchas gracias a los más de 80 participantes que vinieron especialmente a alimentar sus almas!
¡Que tengamos un año bueno y dulce, lleno de alegrías y buenas noticias, hasta que llegue la noticia más linda de todas, la venida de nuestro justo Mashíaj!
¡Shaná Tova Umetuká!